NUEVA YORK,- Joseph Charles Philippe CÔte de 82 años de edad y natural
de Montreal en Canadá, relató esta semana a una corte de esa ciudad que
llevaba décadas viajando a la República Dominicana en busca de menores
con las que tenía sexo y las usaba también para producir pornografía
infantil.
CÔte
, quien fue acusado formalmente de
varios cargos por turismo sexual, pornografía infantil, pedofilia y
otros relacionados con esos delitos el jueves de la semana pasada,
reveló al juez que comenzó a viajar al país caribeño desde 1987.
El anciano acusado está en libertad bajo fianza y deberá regresar
al tribunal el 12 de septiembre de este año. CÔte, es un ex piloto y el
material pornográfico con cientos de imágenes de menores dominicanos de
ambos sexos, le fue decomisado en su ordenador portátil en el aeropuerto Trudeau el 17 de octubre del 2012 cuando regresaba de la República Dominicana.
Diez más tarde, volvió al país caribeño pero fue seguido por la policía que encontró los centenares de fotos y videos de niñas criollas desnudas y que CÔte, les había hecho desde el 2003.
La fiscal Rachel Crown
Pitre dijo en la audiencia de fianza en la Corte Criminal de Quebec que
en las imágenes se ve a niñas de entre 10 y 12 años en una relación
sexual con CÔte, mientras él las besa y las acariciaba en sus partes
íntimas como senos y vaginas.
La fiscal dijo que los videos pudieron
haber sido filmados entre el 2004 y el 2006 y en algunas de las tomas,
se escucha al anciano dando instrucciones a las menores sobre el tipo de relación que le gusta tener con ellas y las posiciones que deben adoptar para satisfacerlo más.
La INTERPOL emitió una orden de arresto el 27 de febrero del 2012 contra el anciano y fue detenido por investigadores dominicanos en la habitación de un motel en Santo Domingo.
La visa dominicana había expirado y fue deportado a Canadá, siendo arrestado por la Policía Montada a su llegada a Montreal.
La fiscal dijo que cuando la policía dominicana apresó a CÔte en el motel, el anciano tenía en la pared de la habitación varias fotos de menores desnudas.
Les dijo a los investigadores que se
pasaba hasta días enteros en el internet en busca de pornografía
infantil. Dijo que comenzó sus visitas a la República Dominicana en
1987, donde conoció a estadounidenses que le presentaron a un grupo de
jóvenes prostitutas.
Añadió que a veces, los padres de muchas
de las menores se las enviaban a él y lo chantajeaban con acusarlo de
violación si no les daba dinero. Narró que solía volar como piloto a la
República Dominicana por la línea Air Service Matane, propiedad
del gobierno de Quebec y en la década de los años cincuentas, voló por
cinco años en aviones de la Real Fuerza Aérea Canadiense.
Declaró que trajo una familia dominicana
a Montreal hace 20 años y terminó casándose con la hija del matrimonio y
que era 45 años más joven que él.
“Es la única familia que tengo”, dijo en
la corte. El mes pasado se le había negado la fianza a pesar de que se
ofreció a pagar $2.000 dólares, prometiendo otros $8.000 y respetar las
condiciones de la libertad bajo palabra.
El juez basó su negativa en que el anciano
dio declaraciones auto incriminatorias a la policía y su conducta
parece ser parte de su estilo de vida y no de un error casual.
Enfrenta un cargo de producción, posesión e importación
de pornografía infantil y dos por contacto sexual con una menor de 14
años de edad, además de seducción a otras de esa misma edad.