NUEVA YORK,- Edwin Vargas,
un veterano policía dominicano asignado al cuartel 40 de El Bronx, se
dedicó a jaquear las cuentas de correos electrónicos de al menos 19
colegas de uniforme, sólo para tratar de averiguar con cuál de ellos se
comunicaba su novia que también es policía y asegurarse de si lo engaña o no.
Aunque los fiscales federales que presentaron ayer miércoles a Vargas
de 42 años de edad en la Corte Federal del Distrito Sur en Manhattan,
donde lo acusaron de conspiración y piratería informática, no han
revelado el motivo que tuvo el oficial para hacer el jaqueo, fuentes de
la investigación revelaron el dato a medios locales.
De ser hallado culpable, Vargas será destituido deshonrosamente del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) y condenado a un año de prisión.
Lleva 20 años como policía de Nueva York
y es padre de un niño de tres años de edad. El policía acusado no habló
durante la audiencia.
(Foto Bryan Pace) |
El juez le impuso una fianza de $50.000 dólares y se le ordenó no salir de la ciudad más allá del condado de Westchester y el suburbio de Long Island, además de que las autoridades monitorearán sus entradas a internet y revisarán las llamadas en su celular.
Su abogado, James Moschella dijo que Vargas
está sorprendido por la acusación y ha dedicado su vida a mantener la
seguridad pública, además de que nunca antes había estado en problemas
con la ley.
Vargas pagó $4.000 dólares a una empresa
para que le consiguiera las claves de los e-mails de sus colegas. El
Comisionado de Policía Raymond Kelly dijo que el detective estaba
tratando de averiguar con quién o quienes se comunicaba su novia.
“Sé que la acusación tiene que ver con que él (Vargas)
contrató una empresa para poder entrar a las cuentas electrónicas y
buscar información acerca de con quien pudiera estar relacionada la
joven mujer y creo que madre de su hijo, que es también policía”, añadió
Kelly.
Los fiscales dicen que Vargas pagó unos
$4.000 dólares a una empresa independiente para que jaqueara 43 cuentas
personales que pertenecen a 30 personas, diecinueve de las cuales son
policías de Nueva York y una labora como parte del personal administrativo.
Uno de los policías está retirado. Después de recibir las claves, Vargas entró al menos a una de las cuentas de uno de sus compañeros identificado por la fiscalía sólo como “Víctima 1″.
Vargas también entró dos veces a la base de datos del Centro Nacional Federal de Crímenes sin autorización para buscar información sobre dos policías cuyas cuentas de correo electrónico había obtenido secretamente.
También accedió a un celular y al parecer, almacenaba las contraseñas en su computadora personal.
Los investigadores hallaron en el disco duro del ordenador de Vargas una lista
con 20 direcciones electrónicas, direcciones postales, números de
teléfonos, información de vehículos y las claves de esas direcciones.
Cada cargo conlleva una condena de un año en la cárcel si Vargas es declarado culpable.