El intruso, identificado como John Dubois, fue detenido el 8 de agosto después de que los empleados de la finca, en la localidad de Water Mill, descubrieran que se había instalado en la casa de la piscina, según el periódico New York Post.
El detenido, de 49 años, permanece en la cárcel del condado de Suffolk a la espera de comparecer en un juzgado de Southhampton, según detalla el diario local Newsday.
El coche de Dubois, un bombero de Rhode Island que se jubiló el año pasado por incapacidad, estuvo aparcado en la entrada de la mansión durante seis días, en los que durmió en un colchón de la casa de la piscina e incluso colgó algunas fotos en internet.
Fuentes de la investigación citadas por el Post aseguran que en el momento de su detención el hombre aseguró a la Policía que era el padre de los hijos de Jennifer López y que ella le había dejado abierta la casa para que viviera allí.
La artista de origen puertorriqueño compró la exclusiva mansión en mayo pasado situada en un terreno de 12.000 metros cuadrados y con ocho dormitorios y siete cuartos de baño, por la que pagó unos 10 millones de dólares (7,4 millones de euros).