La escudería Caterham de Fórmula 1 Internacional, que entró el quiebra el año pasado, venderá hasta sus modelos 2014. La casa de subastas Wyles Hardy & Co reveló en un comunicado que había sido instruida por los administradores de Caterham, la empresa especializada en manejo de bancarrotas Smith & Williamson, "a vender los activos del equipo de carreras de automóviles F1". La crisis de la Fórmula 1 tuvo su origen cuando la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) dejó expuesta la situación que atravesaban los equipos como Caterham o Marussia; de ahí que motivó la búsqueda de un recorte en los costos dentro de este deporte.
Caterham subastará elementos de la temporada pasada en su despedida de la Fórmula 1
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- La casa de subastas Wyles Hardy & Co reveló en un comunicado que había sido instruida por los administradores de Caterham, la empresa especializada en manejo de bancarrotas Smith & Williamson, “a vender los activos del equipo de carreras de automóviles Caterham F1”.
Un cable de la agencia de noticias Reuters dio a conocer que la casa Wyles Hardy & Co llevará a cabo las subastas entre el 11 de marzo y el 14 de mayo, buscarán vender todos los activos del equipo, desde equipamiento de carreras a mobiliario de oficina.
Caterham, que nunca logró sumar puntos en la F1, entró en bancarrota en octubre de 2014 y se perdió los grandes premios de Brasil y Estados Unidos antes de recaudar fondos para competir en la carrera de Abu Dhabi en noviembre pasado.
A fines del mes pasado, el administrador Finbarr O'Connell mantenía la esperanza de encontrar un comprador, aunque reconocía que el tiempo se estaba acabando ya que la temporada comienza en Australia el 15 de marzo.
La primera prueba de pretemporada terminó el miércoles sin la participación de Caterham.
La crisis de la Fórmula 1 tuvo su origen cuando la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) dejó expuesta la situación que atravesaban los equipos como Caterham o Marussia; de ahí que motivó la búsqueda de un recorte en los costos dentro del deporte en el futuro cercano.
En consecuencia, la FIA expresó que sus intenciones eran las de no penalizar a ninguno de los dos equipos después de que estos vayan a perderse al menos dos de las tres carreras que restaban del calendario 2014. De este modo, a pesar de que la decisión final correspondía a los comisarios de la organización, el principal organismo del automovilismo confiaba en la generosidad de estos, por lo que no se adoptará ningún tipo de represalia. En lo que sería la primera parte del documento, la FIA dejó así claro que no buscan dificultar aún más la delicada situación de ambas escuderías.
Esta situación, alcanza a Fiat que es el principal accionista de Ferrari con el 90% de sus acciones. Otro 5% pertenece desde 2005 a un emporio de los Emiratos Árabes y el resto pertenece a Piero Ferrari, hijo del fundador Enzo. La ruptura de la alianza entre Fiat y la marca de “il cavallino rampante” era algo con lo que se especulaba tras la fusión con el gigante estadounidense Chrysler. La salida abrupta del presidente de Ferrari, Luca Cordero de Montezemolo, allanó el camino para este desenlace.
Cuando restaban tres carreras del final de la temporada pasada, la Fórmula 1 se vio amenazada por el final del equipo Caterham, acorralado por las divisiones internas y los problemas financieros.
La controversia entre los compradores y los ex propietarios del equipo escaló notablemente a finales del año pasado, y nadie sabía exactamente quién es el jefe de equipo después de que Manfredi Ravetto dejara su cargo un par de semanas tras haber asumido.
Incluso la fábrica de la escudería en Leafield fue cerrada. Ante estas dificultades, el jefe de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, no quiso asegurar si el equipo será ayudado y si tiene futuro alguno en la Fórmula 1.
Por otra parte, el ex dueño y jefe del equipo, Tony Fernandes aseguró que “si compras algo debes pagar por ello. Es así de simple”. Fernandes respondió así a un comunicado de la escudería en el que se lo denuncia por no haber transferido las acciones de su propiedad.
El 29 de junio, Fernandes había acordado vender la escudería a Engavest SA, un grupo inversor del que hasta hoy se desconoce exactamente quién está detrás. Sin embargo, los nuevos propietarios de Caterham acusan ahora al anterior dueño de haberse negado a cumplir los pasos jurídicos necesarios para transferir sus acciones.
“Después de tres meses en los que el equipo de Fórmula 1 Caterham fue dirigido de buena fe, el comprador se ve ahora forzado a evaluar todas las posibilidades, entre ellas la retirada del equipo”, indicó la escudería en otro comunicado. Pero Fernandes, el anterior dueño, calificó de “basura” las denuncias.
Mientras las acusaciones cruzadas crecían, el jefe de equipo Ravetto anunciaba que dejaba la escudería tras lamentar que “orgulloso de haber formado parte de un grupo extraordinario de personas, aún cuando haya sido por pocas semanas”.
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