“No es nada más quejarnos”, dice Manuel. El artista debe proponer y hacer. Comprometerse.
 La cultura no cesa de crearse en el pueblo mismo. Brota de la vida. La creación cultural es señal de vida, como el latir del corazón o la respiración. Basta con estar atento para advertirlo y descubrirlo. Basta con mirar con serena curiosidad.
Manuel pinta, hace su propuesta temática y estética en los espacios del pueblo, en los espacios públicos. Es muralista. Pinta hermosos murales.
Manuel Omar Hernández, santiaguero del barrio Los Pepines, encuentra en el muralismo una forma de comunicar para cambiar actitudes y comportamientos de su gente en el barrio y más allá.
Sus murales recogen preocupaciones culturales y de preservación medio ambiental, desarrollados en una técnica cubista figurativa.
 Manuel, más conocido en Los Pepines como Oscar, define el muralismo, como su aporte a la sociedad. Dice: “Yo creo que el muralismo viene desde los barrios; en los barrios es donde se vive más la esencia de los pueblos, el contacto con la gente, el vecino, tu oyes muchísimas historias del entorno”.
Desde el gobierno de Danilo Medina celebramos los proyectos culturales que brotan desde las entrañas de los barrios. Simpatizamos con promotores y gestores culturales como Manuel Omar Hernández que enriquecen la identidad cultural dominicana.
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