“Hace tanto calor que parece que va a temblar la tierra”, “este calor y esta humedad parecen de mal tiempo”. Estos son “vaticinios” de muchos dominicanos que no conocen de la meteorología ni la geología, pero que presumen que las altas temperaturas repercuten en ambos fenómenos.
La primera expresión viene de lejos y es que, según el geólogo Osiris de León, la población comenzó a asociar las altas temperaturas con los terremotos desde el 4 de agosto de año 1946, cuando el país fue azotado por un sismo de 8.0 grados, una tarde con un calor severo y un sol intenso.
Para establecer los elementos que inciden para que se produzca un terremoto o un huracán, reporteros de Listín Diario consultaron a De León, quien dice que esos fenómenos naturales responden a factores totalmente distintos, aunque pueden coincidir en un momento y tiempo determinado.
La noche del lunes fue uno de esos días donde coincidieron ambos fenómenos, con un sismo de 6 grados en Puerto Rico y que se sintió de 5.9 en República Dominicana, cuando ambas islas están bajo alerta de lluvias por los fenómenos que se dan en el Atlántico. Actualmente hay dos tormentas tropicales que son Jerry, Karen y el huracán Lorenzo.
“En el planeta tierra no hay vínculos en lo que pasa a lo interno del planeta y lo que pasa a lo externo”, dice al señalar que el calor es el común denominador, pues a lo externo del planeta provoca las tormentas y huracanes y a lo interno afecta la placa tectónica y se producen los temblores de tierra.
“Los terremotos son consecuencia del calor interno del núcleo de la tierra que está a una temperatura superior a los cinco mil grados Celsius, genera corrientes de convección más prácticas, desplazamientos de las placas tectónicas, se chocan las placas tectónicas se deforman, se rompen las rocas de la corteza terrestre y eso es lo que producen los terremotos” describió De León.
La rotura sísmica que se produjo en el borde sur-oeste de la trinchera de Puerto Rico, que es la fosa de Milwaukee, que está al norte de Puerto Rico y al este de semana, De León dijo que es la segunda fosa más profunda del planeta tierra, que tiene 8,560 metros de profundidad y es una zona donde la placa tectónica de Norteamérica penetra por debajo de la placa tectónica del Caribe y genera una compresión de la roca que en un momento determinado provoca una rotura, la cual para reajustarse tardará unas dos semanas y seguirá provocando réplicas .
Los huracanes
En el caso de los huracanes en el Atlántico, cuya temporada inicia el 1 de junio y termina el 30 de noviembre, el geólogo dijo que estos se deben al calor externo del planeta tierra, fruto de que en el verano en las franjas tropicales se producen mucho vapor de agua a partir de la acción de la radiación solar sobre la superficie del mar y ese valor de agua se eleva hasta los niveles altos de la tropósfera, contribuye a generar un centro de baja presión, termina generando una rotación y a medida que se va fortaleciendo, entonces pasa a depresión tropical, tormenta tropical y a huracanes en la escala Saffir-Simpson que van desde huracanes que van desde categoría 1 hasta 5. “Pero no hay relación entre los huracanes y los terremotos”.