Washington, 27 Sep (Notimex).- Estados Unidos
expresó hoy su preocupación sobre las prácticas laborales en el sector
cañero de República Dominicana y la aparente inhabilidad del gobierno
para implementar acciones correctivas.
Un informe preparado por el Departamento del Trabajo dio cuenta de “violaciones aparentes y potenciales a la legislación laboral”, respecto a situaciones relacionadas con condiciones de trabajo, salario mínimo, seguridad y trabajo infantil.
El reporte “destaca las preocupaciones laborales en el sector cañero dominicano y los cortos alcances de la habilidad del gobierno para identificarlos y corregirlos”, informó el secretario del Trabajo, Thomas Pérez en un comunicado.
Agregó que el reporte presenta recomendaciones para avanzar y reafirma la disposición de su gobierno para trabajar con el dominicano “a fin de lograr hacer una diferencia real en las vidas de estos trabajadores”.
El documento fue preparado en respuesta a denuncias hechas por el sacerdote Christopher Hartley, en el sentido de que el gobierno dominicano ha fracasado en hacer valer las leyes laborales en el sector cañero.
Bajo el capítulo 16 del Tratado de Libre Comercio con Centroamérica y República Dominicana (CAFTA-DR) el gobierno dominicano está obligado a hacer valer las leyes laborales al respecto.
Aunque las autoridades llevaron a cabo miles de inspecciones para verificar las condiciones laborales en este sector desde 2007, el reporte hizo notar deficiencias de procedimiento y metodológicas en su conducción.
Tales fallas, apuntó el documento, “menoscaban la capacidad del gobierno de identificar de modo efectivo las violaciones en materia laboral”.
El reporte detectó la ausencia de visitas de seguimiento, ausencia de acciones legales contra infractores, entrevistas de trabajadores con presencia de directivos y falta de traductores para entrevistar a trabajadores haitianos que hablan creole.
Junto al reporte, el Departamento del Trabajo anunció una asignación de 10 millones de dólares para financiar un proyecto destinado a reducir el trabajo infantil y mejorar las condiciones de los trabajadores del campo dominicano.
Un informe preparado por el Departamento del Trabajo dio cuenta de “violaciones aparentes y potenciales a la legislación laboral”, respecto a situaciones relacionadas con condiciones de trabajo, salario mínimo, seguridad y trabajo infantil.
El reporte “destaca las preocupaciones laborales en el sector cañero dominicano y los cortos alcances de la habilidad del gobierno para identificarlos y corregirlos”, informó el secretario del Trabajo, Thomas Pérez en un comunicado.
Agregó que el reporte presenta recomendaciones para avanzar y reafirma la disposición de su gobierno para trabajar con el dominicano “a fin de lograr hacer una diferencia real en las vidas de estos trabajadores”.
El documento fue preparado en respuesta a denuncias hechas por el sacerdote Christopher Hartley, en el sentido de que el gobierno dominicano ha fracasado en hacer valer las leyes laborales en el sector cañero.
Bajo el capítulo 16 del Tratado de Libre Comercio con Centroamérica y República Dominicana (CAFTA-DR) el gobierno dominicano está obligado a hacer valer las leyes laborales al respecto.
Aunque las autoridades llevaron a cabo miles de inspecciones para verificar las condiciones laborales en este sector desde 2007, el reporte hizo notar deficiencias de procedimiento y metodológicas en su conducción.
Tales fallas, apuntó el documento, “menoscaban la capacidad del gobierno de identificar de modo efectivo las violaciones en materia laboral”.
El reporte detectó la ausencia de visitas de seguimiento, ausencia de acciones legales contra infractores, entrevistas de trabajadores con presencia de directivos y falta de traductores para entrevistar a trabajadores haitianos que hablan creole.
Junto al reporte, el Departamento del Trabajo anunció una asignación de 10 millones de dólares para financiar un proyecto destinado a reducir el trabajo infantil y mejorar las condiciones de los trabajadores del campo dominicano.