SANTO DOMINGO.- El recluso Mario José Redondo Llenas remitió una
carta al director de elCaribe, en el que reivindica su condición para
aplicar por la libertad condicional.
Redondo Llenas está condenado a 30 años de cárcel, por haber matado de 34 puñaladas, a su primo, José Rafael Llenas Aybar, de 12 años, cuyo cuerpo fue hallado atado de pies y manos en un arroyo del municipio Santo Domingo Oeste.
En la misiva enviada al periodista Osvaldo Santana, Redondo Llenas hace referencias al arrepentimiento que dice sentir por la muerte sádica de su pariente cercano, en el año 1996.
“Vivo con inconmensurables cuotas de dolor, lágrimas en el alma, consecuencia natural de mi vinculación con la horrible tragedia que acabó con la vida de mi primo”, expresa el recluso.
Señala que su acción fracturó la unidad de su familia y generó profunda pena en el seno de la sociedad dominicana.
Luego de esas palabras, el siguiente párrafo de su misiva lo dedicó a destacar las cualidades que, a su juicio, lo facultan para que sus acciones y conducta como recluso sean reconocidas por el sistema penitenciario dominicano.
Dijo que con la ayuda de Dios, amigos y familiares ha ayudado a otros a optar por alternativas positivas en el contexto de la realidad penitenciaria dominicana.
“Se puede afirmar que me he formado académicamente, incluyendo en el plano técnico, cabiendo destacar el hecho de que tengo más de un grado universitario.
En el plano laboral, me he dedicado con cabeza y corazón a la formación de adultos, incluyendo publicaciones profesionales, al punto que debo también agradecer que oficiales y privados hasta han entendido oportuno distinguirme”, expone Redondo Llenas en su carta enviada a Santana.
“Con toda humildad puedo afirmar que no hay espacio para dudas, ayudando me he ayudado y en el proceso he acumulado una larga lista de afectos, intenciones y genuinas amistades forjadas al calor de la adversidad”, añade el recluso.
Al final de la carta, Redondo Llenas dedica algunas lÃneas a los padres del niño Llenas Aybar “¿Cómo cerrar estas lÃneas sin hacer mención directa de mis tÃos, José Rafael e Ileana? No ha pasado un dÃa durante estos muchos años sin que los piense más de una vez, siempre con dolor”.
Redondo Llenas está condenado a 30 años de cárcel, por haber matado de 34 puñaladas, a su primo, José Rafael Llenas Aybar, de 12 años, cuyo cuerpo fue hallado atado de pies y manos en un arroyo del municipio Santo Domingo Oeste.
En la misiva enviada al periodista Osvaldo Santana, Redondo Llenas hace referencias al arrepentimiento que dice sentir por la muerte sádica de su pariente cercano, en el año 1996.
“Vivo con inconmensurables cuotas de dolor, lágrimas en el alma, consecuencia natural de mi vinculación con la horrible tragedia que acabó con la vida de mi primo”, expresa el recluso.
Señala que su acción fracturó la unidad de su familia y generó profunda pena en el seno de la sociedad dominicana.
Luego de esas palabras, el siguiente párrafo de su misiva lo dedicó a destacar las cualidades que, a su juicio, lo facultan para que sus acciones y conducta como recluso sean reconocidas por el sistema penitenciario dominicano.
Dijo que con la ayuda de Dios, amigos y familiares ha ayudado a otros a optar por alternativas positivas en el contexto de la realidad penitenciaria dominicana.
“Se puede afirmar que me he formado académicamente, incluyendo en el plano técnico, cabiendo destacar el hecho de que tengo más de un grado universitario.
En el plano laboral, me he dedicado con cabeza y corazón a la formación de adultos, incluyendo publicaciones profesionales, al punto que debo también agradecer que oficiales y privados hasta han entendido oportuno distinguirme”, expone Redondo Llenas en su carta enviada a Santana.
“Con toda humildad puedo afirmar que no hay espacio para dudas, ayudando me he ayudado y en el proceso he acumulado una larga lista de afectos, intenciones y genuinas amistades forjadas al calor de la adversidad”, añade el recluso.
Al final de la carta, Redondo Llenas dedica algunas lÃneas a los padres del niño Llenas Aybar “¿Cómo cerrar estas lÃneas sin hacer mención directa de mis tÃos, José Rafael e Ileana? No ha pasado un dÃa durante estos muchos años sin que los piense más de una vez, siempre con dolor”.