Con sus 19 votos electorales, Pensilvania es el estado que más peso tiene entre los que pueden hacer oscilar las elecciones. Por eso los demócratas han elegido Pittsburgh, cuna del acero estadounidense, y a Barack Obama, uno de sus mejores activos, para defender la candidatura de Kamala Harris. En esta carrera tan reñida, también intentan disuadir a los votantes para que no se dejen tentar por el bando contrario. |