La ampliación y modernización del puerto de Mariel, en Cuba, fue una gran apuesta de la empresa Odebrecht, y de los gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff: un día llegaría la normalización de relaciones entre Cuba y USA, y esa infraestructura tendría sentido. El levantamiento del embargo comercial de USA a Cuba será la consecuencia natural de la normalización de relaciones diplomáticas. Y Brasil cuenta con la infraestructura apropiada en Cuba para aprovechar el nuevo escenario.
Cuba está estudiando las propuestas realizadas por 15 países, España, Brasil y Rusia entre ellos, para invertir en la Zona Especial de Desarrollo de Mariel. El puerto cubano se perfila como una seria competencia para el de Miami.
Mariel es un municipio de la Provincia de Artemisa en Cuba. Su nombre deriva del antiguo cacicazgo aborígen llamado Marien, tributario del cacicazgo de Guaniguanico a la llegada de los españoles. Mariel es un centro económico importante con un puerto sustituto del de La Habana con una base de contenedores, capaz de recibir buques pos-panamax: los de mayor calado, que pueden cargar hasta 9.000 contenedores, pero no pueden pasar por el actual canal de Panamá. Posee también una fábrica de cemento y una central eléctrica. El puerto está conectado con La Habana mediante la carretera Panamericana, que bordea la costa norte. El auge actual y futuro es por las inversiones para mover el comercio naval del puerto de La Habana hacia el puerto del Mariel: un megapuerto con un muelle de longitud de 2.400 metros y un patio de contenedores con un area de 128.1 hectareas, construccion de la brasileña Odebrecht con financiación del Estado brasilero, superior a US$ 8.000 millones. También se estan construyendo otras obras de infraestructura como carreteras y líneas de tren. Se ha dragado un canal de una profundidad de 17,9 metros, que permitirá mover más de 800.000 contenedores al año, el doble de la capacidad del puerto de La Habana. El consorcio de Singapur PSA International, uno de los mayores operadores portuarios del mundo, dirigirá el tráfico.
BRASILIA (247). La poderosa Federación de las Industrias del Estado de São Paulo (Fiesp) y su Centro de las Indústrias del Estado de Sao Paulo (Ciesp) estimaron que el ingreso per cápita de los cubanos podría duplicarse en una década gracias al restablecimiento de relaciones diplomáticas entre la isla y Estados Unidos, abriendo una gran oportunidad para los negocios brasileños en Cuba.
Las entidades celebraron en una nota el anuncio hecho por el miércoles por los presidentes Barack Obama y Fidel Castro.
"El PIB per capita cubano podrá duplicarse en los próximos diez años", afirmó el presidente de las entidades empresariales brasileñas, Paulo Skaf. El dirigente empresarial dijo que la reaproximación Cuba-Estados Unidos permitirá también el incremento del flujo comercial del país antillano "con sus principales socios. Brasil entre ellos".
Para el director del departamento de Relaciones Internacionales y Comercio Exterior (Derex) de la Fiesp, Thomaz Zanotto, "ahora es el momento para que Brasil intensifique su política aún más su política de inversión, ya que esas inversiones estimularán la exportación de bienes y servicios brasileños para Cuba y toda América Latina".
En ese contexto, el puerto de Mariel, localizado a menos de 150 kilómetros de Estados Unidos y modernizado con inversión y servicios de construcción e ingeniería provistos por Brasil, se tornó aún más estratégico para los negocios brasileños.
Brasil tiene con Cuba un superávit comercial de US$ 431 millones anuales, principalmente gracias a las exportaciones de alimentos y máquinas. Esa corriente comercial convirtió al país sudamericano en el segundo mayor socio de la isla.
A medida que la isla amplíe sus negocios con Estados Unidos, mejores condiciones tendrán las empresas brasileñas para instalar subsidiarias en Cuba y vender desde allí a Estados Unidos.
"El presidente Obama vio ahora lo que el gobierno brasileño y Odebrecht vieron antes", dijo a Brasil/247 el director de comunicación de Odebrecht Infraestrutura para América Latina y el Caribe, Márcio Polidoro. "Identificamos el mercado cubano como promisorio y salimos en la delantera usando los mecanismos existentes en el BNDES para el incentivo a las exportaciones", dijo Polidoro en relación al puerto de Mariel.
Odebrecht participó y culminó la modernización del estratégico puerto de Mariel con el apoyo financiero del estatal Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social, BNDES, de Brasil.
En Brasil, el contrato para modernizar el puerto de Mariel fue duramente cuestionado por la oposición al gobierno de la presidenta Dilma Rousseff.
Sin embargo, en su defensa, Marcelo Odebrecht, presidente del gigante Odebrecht, dijo este año en un artículo en la prensa brasileña que se revelaría profético que el puerto es un ejemplo de la alianza estratégica con la que Brasil busca oportunidades para sus empresas en momentos en que Cuba comienza a abrir su economía.
Además, enfatizó que era una apuesta a un futuro levantamiento del embargo comercial impuesto desde hace más de medio siglo por Estados Unidos, que impide a la isla comerciar con su vecino a sólo 145 kilómetros de distancia.
Mariel está situado frente a la costa de Florida y una vez terminada la ampliación del canal de Panamá podría transformarse en un centro de trasbordo para los gigantescos cargueros post Panamax.
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