El ex presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) José María Marin fue detenido en Suiza junto a otros 6 dirigentes de la FIFA bajo acusaciones de formar parte de un esquema de corrupción durante al menos 2 décadas. El actual presidente de la CBF, Marco Polo Del Nero, defendió a su antecesor y actual vicepresidente, asegurando que los contratos investigados en USA fueron firmados antes de la gestión de Marin (así apuntó contra Ricardo Texeira). La secretaria de Justicia estadounidense, Loretta Lynch, afirmó que el Mundial de Fútbol celebrado en 2014 en Brasil será investigado a fondo, y que los acusados de corrupción pueden ser detenidos hasta por 20 años. "El proceso de candidatura de Brasil para el Mundial de 2014 ya está siendo investigado", dijo Lynch en una conferencia de prensa en Nueva York. "Las penas para los acusados pueden llegar hasta 20 años de cárcel, pero depende de cada uno de los acusados. Vamos a ver ca da investigación caso a caso para ver la posible pena para cada individuo", agregó. El fiscal federal de Nueva York, Kelly Currie, dijo que varios países están colaborando con la investigación, que tiene como objetivo "limpiar el fútbol mundial".
Los nombres de 3 brasileños constan en la investigación: el detenido ex presidente de la CBF, José Maria Marin (foto), y los empresarios José Hawilla, de Traffic Group; y José Margulies, dueño de empresas de televisación de eventos deportivos.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Luiz Inácio Lula da Silva ha sobrevivido a muchas investigaciones de corrupción que involucraron a allegados y colaboradores. Sin embargo, ¿podrá sobrevivir a la que realizará la Justicia estadounidense con colaboración del FBI (Federal Bureau Investigation)?
Sucede que cómo consiguió Brasil tan velozmente que le concedieran la organización del Mundial de Fútbol 2014 es un tema sobre el que la Justicia estadounidense ya aplicó su lupa, y eso sucedió durante el 2do. mandato presidencial consecutivo de Lula da Silva. ¿Todo fue transparente?
Por ahora, sólo se sabe que José Maria Marin, ex presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol y uno de los principales dirigentes históricos del fútbol brasileño, fue arrestado en Zúrich (Suiza), junto a otros 6 dirigentes del fútbol global, a petición de USA, y se encuentran en espera de la extradición a ese país por sospechas de corrupción en la entidad rectora del fútbol global, informó en un comunicado la Oficina Federal de Justicia de Suiza.
Todos son funcionarios de alto rango de la FIFA que se encontraban en Suiza para el Congreso de la organización, en el que su presidente Sepp Blatter busca su reeleción con la competencia del príncipe jordano Ali Bin Al Hussein. Los detenidos son, además del octogenario Marin, Jeffrey Webb (Concacaf), Eduardo Li (Federación de Costa Rica), Julio Rocha (Federación de Nicaragua), Costas Takkas (ex presidente de la Federación de Islas Cayman), Eugenio Figueredo (ex presidente de la Conmebol) y Rafael Esquivel (Federación Venezolana de Fútbol).
"Las autoridades estadounidenses sospechan que (los detenidos) recibieron sobornos que ascendieron a millones de dólares", dijo el comunicado.
"Las órdenes de captura fueron emitidas a raíz de una solicitud de las autoridades de Estados Unidos. La Oficina del Fiscal Federal para el Distrito Este de Nueva York está investigando a estos individuos bajo sospecha de la aceptación de sobornos entre principios de la década de 1990 y la actualidad", agregó.
El comunicado dijo que los sospechosos de soborno -representantes de medios de comunicación deportivos y empresas de promoción deportiva- están acusados de haber participado en tramas para hacer pagos a dirigentes del fútbol -delegados de la FIFA y otros funcionarios de suborganismos de la FIFA- por un total de más de 100 millones de dólares.
"A cambio, se cree que recibieron derechos de televisión, marketing y patrocinio en conexión con torneos de fútbol de América Latina", agregó.
De acuerdo con la solicitud de Estados Unidos, estos delitos se acordaron y se prepararon en ese país y los pagos se realizaron a través de bancos estadounidenses.
Según el comunicado, los detenidos serían interrogados por la policía de Zúrich con relación a la solicitud de Estados Unidos.
El organismo rector del fútbol mundial, la FIFA, describió las detenciones como un "momento difícil", pero dijo que su presidente, Joseph Blatter, no renunciará y que las próximas Copas del Mundo seguirá adelante como estaba previsto en Rusia y Qatar.
"Sin duda, es un momento difícil para nosotros", dijo el portavoz Walter De Gregorio. "Es un momento duro para nosotros. Pero esto es bueno para la FIFA. Confirma que vamos por el camino correcto. Duele. No es fácil. Pero es el camino correcto a seguir", agregó.
Sin duda un ignorante el tal De Gregorio porque todos saben que ahora la Fiscalía estadounidense le ofrecerá a los detenidos identificar a otros culpables a cambio de reducir la imputación y la pena. Por lo tanto, nadie sabe dónde puede terminar esto, tal como lo saben los propios brasileros que ha ocurrido en la investigación por corrupción en Petrobras.
De Gregorio agregó que la elección del presidente de la FIFA, donde se espera que Blatter obtenga un 5to. mandato consecutivo, procederá este viernes 29/05, tal como estaba previsto.
El Mundial 2014
La secretaria de Justicia de Estados Unidos, Loretta Lynch, afirmó que el Mundial de Fútbol 2014 en Brasil será investigado a fondo, y que los acusados de corrupción pueden ser detenidos hasta por 20 años.
"El proceso de candidatura de Brasil para el Mundial de 2014 ya está siendo investigado", dijo Lynch en una conferencia de prensa en Nueva York.
"Las penas para los acusados pueden llegar hasta 20 años de cárcel, pero depende de cada uno de los acusados. Vamos a ver cada investigación caso a caso para ver la posible pena para cada individuo", agregó.
El fiscal federal de Nueva York, Kelly Currie, dijo que varios países están colaborando con la investigación, que tiene como objetivo "limpiar el fútbol mundial".
USA condujo la investigación porque los sobornos se distribuyeron en suelo estadounidense, además de involucrar a entidades con sede en el país, como la Concacaf, que está en Miami (Florida).
En el caso de Brasil, las sospechas recaen sobre contratos de patrocinio y de transmisión del Mundial 2014 firmados por la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).
Los nombres de 3 brasileños constan en la investigación: el detenido ex presidente de la CBF, José Maria Marin, y los empresarios José Hawilla, de Traffic Group; y José Margulies, dueño de empresas de televisación de eventos deportivos.
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