La criminalidad organizada tiene prácticamente secuestrada a gran parte de América Latina. Grupos delincuenciales dedicados al narcotráfico, trata de personas con fines de explotación sexual, extorsiones, lavado de dinero, entre otros delitos, han ganado mayor hegemonía territorial en países como Perú, Venezuela, Brasil, Chile y otros cinco países, en las últimas dos décadas, a través de acciones violentas. |